
El exgerente de la municipalidad de Lima durante la gestión de Susana Villarán, José Miguel Castro, recibió US$1 millón en efectivo de los US$3 millones que acordó entregar la constructora Odebrecht a la campaña contra la revocatoria de la exalcaldesa.
Durante la respuesta a la demanda que Rutas de Lima planteó ante un tribunal arbitral en Washington, Estados Unidos, contra la Municipalidad Metropolitana de Lima (MML), en relación a incumplimientos del contrato de concesión, la defensa de esta presentó como testigo a José Miguel Castro.
También entregó declaraciones de los colaboradores eficaces del exintentende de Odebrecht, Jorge Barata, y del exgerente de Rutas de Lima, Raúl Pereira Neto.
La defensa del municipio pretendía demostrar que la concesión a favor de Rutas de Lima era resultado de presuntos acuerdos corruptos. En esa línea, dio cuenta de las confesiones de Barata y Pereira, según las cuales Odebrecht proporcionó US$3 millones que solicitó José Miguel Castro para financiar la campaña contra la revocatoria de Villarán. De ese monto. Pereira personalmente le dio US$1 millón a “Budián”, sobrenombre con el que los brasileños conocían a Castro.
Aunque el tribunal de arbitraje de Washington rechazó las pretensiones de la MML porque la defensa no acreditó que Odebrecht pagó sobornos a cambio de la concesión de los peajes, el laudo arbitral del caso contiene las manifestaciones de los brasileños Barata y Pereira que incriminan a José Miguel Castro, “Budián”.
Para las fuentes policiales y fiscales consultadas, las delaciones de Barata y Pereira, además de la evidencia documental que proporcionó Odebrecht sobre los pagos ilícitos para la campaña de Villarán, garantizaban una condena segura contra Castro. La perspectiva de la sentencia de 25 años para él, y de 15 años para su cuñada, Daniela Maguiña Ugarte, quien está acusada de lavar los fondos proporcionados por la constructora brasileña, afectaba seriamente la estabilidad emocional de Castro. Esta situación podría haber influido en la decisión del exgerente municipal de suicidarse.
Confesiones en directo
Para sustentar las afirmaciones de Barata y Pereira, Odebrecht suministró el registro de transferencias de los US$3 millones desde cuentas del Departamento de Operaciones Estructuradas (la fuente del dinero de origen ilícito para pagar sobornos), suma que comprendía el US$1 millón que se le dio a Castro o “Budián”.
Así lo manifestó Jorge Barata como colaborador eficaz:
“(Jorge Barata) le comunicó (a José Miguel Castro) que realizaría el pago de US$3 millones a título de contribución para la campaña (contra la) revocatoria. (…). A pedido de José Miguel Castro en (una) reunión, parte de los valores fueron depositados en cuentas por él indicadas o puestos a disposición en efectivo en el país, y en otra parte aproximadamente US$2 millones, fueron pagados directamente al publicista responsable por la campaña política, el franco argentino, naturalizado brasilero, Luis Favre, a través de Waldemir Garreta, político brasileiro”.
Barata señaló claramente las circunstancias en las que “Budián”, José Miguel Castro, le demandó US$3 millones para financiar la campaña de Susana Villarán, prometiéndole acceder a los requerimientos de Odebrecht a la Municipalidad Metropolitana. Esto es lo que dijo Jorge Barata:
“Alrededor de febrero o marzo de [2013], el colaborador (Barata) recibió una llamada, en el teléfono de la oficina de Lima, de José Miguel Castro, gerente de la Municipalidad, solicitando una reunión. (…) El colaborador (Barata) asistió a la reunión. (…) En esa ocasión, José Miguel Castro dijo que precisaba hacer una campaña para preservar el mandato de la alcaldesa y que contaba con el apoyo de la empresa (Odebrecht), solicitando US$3 millones (…)”.
La ruta del dinero
Jorge Barata no dejó dudas sobre la intervención directa de Castro en el requerimiento de los US$3 millones para la campaña de Villarán. Así lo dijo:
“Sí, fui llamado al despacho del señor José Miguel Castro. (…) (Fue) cuando me pidió para que apoyara, me pidió que apoyara con tres millones de dólares para la campaña (de Villarán). Las personas que iban a estar encargadas de la campaña eran el señor Vladimir Garreta y el señor Favre, que eran personas que habían hecho la campaña del señor Ollanta Humala en la cual también hemos participado. (…) La coordinación fue que de esos tres millones, dos millones se pagarían en Brasil. Esto a través del señor Garreta, ¿no? Y un millón se daría allá en Perú al señor (José) Miguel Castro para efecto de gastos locales, ¿no? Esto fue así acordado, ¿no?”.
El representante de Rutas de Lima, Raúl Pereira Neto, confirmó que “Budián” solicitó los US$3 millones:
“Jorge Barata había sido invitado a una reunión en la Municipalidad (…), me llamó, entonces, yo estuve con él. (…) Para nuestra sorpresa no se habló del proyecto (que les interesaba). En esta reunión estaba José Miguel Castro y lo que pasó fue que José Miguel Castro hizo un pedido de apoyo a la campaña contra la revocatoria. (El) monto (fue) de tres millones de dólares.(…) El pedido había sido de tres millones de dólares. Si no me equivoco dos millones en Brasil y un millón en Perú para el apoyo de marketing, de publicidad de la campaña (de Villarán). (…)”.
Jorge Barata acopiaba el dinero enviado por Odebrecht, recogía el efectivo y se lo trasladaba a Raúl Pereira Neto, y este a su vez lo llevaba a Castro, conforme su testimonio acreditado:
“Conforme al extracto de la declaración del señor Barata, los dineros enviados por Odebrecht a través de las diferentes compañías (de fachada) fueron después entregados en efectivo a Jorge Barata en sus oficinas en Perú y luego trasladaba esos recursos al señor Raúl Pereira Neto y él los entregaba al señor José Miguel Castro”.
Barata también confesó que el apodo “Budián” correspondía a José Miguel Castro:
“El ‘codinome’ Budián corresponde a la persona de José Miguel Castro, gerente general de la MML (Municipalidad Metropolitana de Lima (MML), y el concepto de pago corresponde a la campaña de Susana Villarán de la revocatoria. Y lo he precisado en mi declaración en la ciudad de Curitiba (Brasil)”.
Además, la defensa del municipio limeño aseguró que Castro recibió el dinero y lo trasladó a la Asociación Amigos de Lima Metropolitana, que se encargó de lavar los fondos de Odebrecht para financiar la campaña contra la revocatoria de Susana Villarán. Así consta en el laudo arbitral: “El dinero fue entregado a José Miguel Castro Gutiérrez y fue invertido en la campaña a través de la Asociación de Amigos de Lima, entre otras personas nombradas por primera vez en la acusación”.
Lo que no se indica es que en la mencionada asociación laboraba como directora de Asuntos Económicos, Daniela Maguiña Ugarte, cuñada de José Miguel Castro. Su función fue lavar el dinero de Odebrecht, por lo que la fiscalía ha solicitado para ella una pena de cárcel de 15 años.
¿“Budián” se suicidó para evitar confirmar la acusación contra su cuñada Daniela Maguiña Ugarte? ¿La cercanía del juicio y la potencial condena de 25 años lo impulsaron a quitarse la vida?, se preguntan los agentes de Homicidios.
El arbitraje que perdió la MML en Washington
- Debido a que la MML suspendió los peajes concesionados a Rutas de Lima, la empresa planteó el arbitraje en Washington en marzo de 2019.
- La MML contrademandó alegando el supuesto origen ilícito de la concesión a favor de Rutas de Lima.
- En diciembre de 2022, el tribunal confirmó las demandas de Rutas de Lima y rechazó la contrademanda de la MML.
- El tribunal ordenó a la MML abonar a Rutas de Lima S/27.9 millones, por concepto de peajes no recaudados entre diciembre de 2017 a noviembre de 2018.
- El tribunal también determinó que no existía relación entre la concesión de los peajes a Rutas de Lima, y los aportes de campaña que hizo Odebrecht a la campaña contra la revocatoria de la exalcaldesa Susana Villarán. Por lo que declaró válido el contrato de concesión. Recientemente instancias judiciales de Estados Unidos confirmaron la legalidad del contrato.
